El año pasado se cumplieron 20 años de la aparición de la serie Forgotten Realms, o como se conoce en nuestro idioma Reinos Olvidados. Uno de los libros mas destacados de esta serie es el de Homeland o “La Morada” en nuestro idioma, escrito por R.A. Salvatore y que es protagonizado por el elfo oscuro Drizzt Do`Urden quien con sus cimitarras y en compañía de su pantera negra mágica, se ha convertido en un personaje entrañable y con gran esencia argumental.
Como comentaba, dentro de la celebración del vigésimo aniversario se puso a la venta la adaptación oficial al comic de esta obra, por parte de la pequeña editorial independiente Devil Due Publishing o DDP. Ladaptacion a comic no es mala, pero no logra transmitir de la misma manera los acontecimientos y situaciones que incluye el libro con la misma emotividad y fuerza de su versión original.
Para aquellos que no conozcan la trama, Homeland nos transporta a un escenario sombrio, la ancestral ciudad de los elfos oscuros, Menzoberranzan, la antípoda oscura.
Menzoberranzan se encuentra ubicada en una serie de cavernas en las cuales nunca ha tocado la luz del sol y terribles criaturas se agitan en la obscuridad, produciendo un ambiente escabroso, lleno de mortales peligros y una sombria atmosfera de oscuridad. En una de esas cavernas se encuentra la antigua ciudad, esculpida en las piedras y estalactitas ancestrales, donde todo lo que forma parte del entorno ha sido modificado con la maestría de las razas elficas, pero con un estilo oscuro y aterrador en honor a Lloth, la Reina Araña, deidad del Caos.
Las casas nobles, cuna de la aristocracia en Menzoberranzan buscan siempre escalar en status, en busca del poder en la sociedad Drow. Dentro de antípoda oscura las casas intentan ascender en posición, mediante la eliminación de las casas rivales según la ley de la Reina Araña. Esta ley atroz establece que una casa puede derrocar a otra (eso implica su total aniquilación), siempre y cuando, no exista ninguna prueba de este ataque. Dentro de la sociedad Drow matar a traición, no es considerado un comportamiento indebido, incluso es plausible, siempre y cuando, no exista pruebas de ello, como una muestra de la crueldad y vileza de esta raza.
En la sociedad Drow las mujeres son aquellas que ocupan los puestos de poder estableciendo un matriarcado dominante y donde los machos oprimidos solo pueden aspirar a la condición de guerreros. La matriarca de cada casa Drow y las sacerdotisas son quienes ejercen el poder y ellas están en contacto con la obscura deidad araña.
Es precisamente en medio de uno de los ataques a una casa rival cuando dentro de la casa D`Urden nace Drizzt, tercer varón de la casa, cuyo destino es ser sacrificado a Lloth para asegurar la victoria sobre la casa rival, los dolores del parto le proporcionan a la matrona Malicia, regente de la casa D`Urden la fuerza suficiente para llevar a cabo un ataque fulminante y definitivo sobre sus rivales.
El sacrificio esta a punto de consumarse cuando en un acto de traición dentro de la misma casa vencedora el segundo hijo mata al primogénito, salvando de manera involuntaria la vida al recién nacido Drizzt. Años después, el joven elfo comienza su entrenamiento guerrero con el maestro de armas de la casa D`Urden, el noble Zaknafein que posee un código ético diferente a los demás Drows. Drizzt aprende el uso de las armas de manera destacada, convirtiéndose en un guerrero temible tanto con las armas, como en el uso de la magia, pero también obtiene de su mentor una formación ética incomprensible para la sociedad vil y sin principios que lo rodea. Es precisamente ese código moral aquello que caracteriza a Drizzt y que le produce grandes problemas con los habitantes de la ciudad oscura y que marcara la vida del Drow, sumiéndolo en una contradicción constante entre su formación moral y la vileza, crueldad, traición y maldad propia de su especie.
Regresando al comic, como mencione antes, la adaptación no es mala, incluso entretenida, pero no permite ahondar en lo singularmente aterradora sociedad Drow, que el libro logra reflejar con gran definición y eficacia artística en el detalle. Esto es comprensible, debido a la complejidad que presenta adaptar de manera apropiada una obra literaria y que se queda lejos de plasmar en tres cómics de 48 paginas todo lo que el libro puede ofrecer. Con todo y los inconvenientes mencionados, el trabajo ofrecido es aceptable y que nos permite hacer un esbozo grafico de la atrapante esencia de los reinos de las profundidades, con sus razas, criaturas, ciudades, entornos y rasgos característicos de estos “Reinos Olvidados”.
Por cierto hace unos años en nuestro país, Planeta de Agostini puso a la venta este libro dentro de su colección Literatura Fantástica, así como sus secuelas “El Exilio” y “El Refugio” a un precio muy accesible y con un buen formato editorial.
Como comentaba, dentro de la celebración del vigésimo aniversario se puso a la venta la adaptación oficial al comic de esta obra, por parte de la pequeña editorial independiente Devil Due Publishing o DDP. Ladaptacion a comic no es mala, pero no logra transmitir de la misma manera los acontecimientos y situaciones que incluye el libro con la misma emotividad y fuerza de su versión original.
Para aquellos que no conozcan la trama, Homeland nos transporta a un escenario sombrio, la ancestral ciudad de los elfos oscuros, Menzoberranzan, la antípoda oscura.
Menzoberranzan se encuentra ubicada en una serie de cavernas en las cuales nunca ha tocado la luz del sol y terribles criaturas se agitan en la obscuridad, produciendo un ambiente escabroso, lleno de mortales peligros y una sombria atmosfera de oscuridad. En una de esas cavernas se encuentra la antigua ciudad, esculpida en las piedras y estalactitas ancestrales, donde todo lo que forma parte del entorno ha sido modificado con la maestría de las razas elficas, pero con un estilo oscuro y aterrador en honor a Lloth, la Reina Araña, deidad del Caos.
Las casas nobles, cuna de la aristocracia en Menzoberranzan buscan siempre escalar en status, en busca del poder en la sociedad Drow. Dentro de antípoda oscura las casas intentan ascender en posición, mediante la eliminación de las casas rivales según la ley de la Reina Araña. Esta ley atroz establece que una casa puede derrocar a otra (eso implica su total aniquilación), siempre y cuando, no exista ninguna prueba de este ataque. Dentro de la sociedad Drow matar a traición, no es considerado un comportamiento indebido, incluso es plausible, siempre y cuando, no exista pruebas de ello, como una muestra de la crueldad y vileza de esta raza.
En la sociedad Drow las mujeres son aquellas que ocupan los puestos de poder estableciendo un matriarcado dominante y donde los machos oprimidos solo pueden aspirar a la condición de guerreros. La matriarca de cada casa Drow y las sacerdotisas son quienes ejercen el poder y ellas están en contacto con la obscura deidad araña.
Es precisamente en medio de uno de los ataques a una casa rival cuando dentro de la casa D`Urden nace Drizzt, tercer varón de la casa, cuyo destino es ser sacrificado a Lloth para asegurar la victoria sobre la casa rival, los dolores del parto le proporcionan a la matrona Malicia, regente de la casa D`Urden la fuerza suficiente para llevar a cabo un ataque fulminante y definitivo sobre sus rivales.
El sacrificio esta a punto de consumarse cuando en un acto de traición dentro de la misma casa vencedora el segundo hijo mata al primogénito, salvando de manera involuntaria la vida al recién nacido Drizzt. Años después, el joven elfo comienza su entrenamiento guerrero con el maestro de armas de la casa D`Urden, el noble Zaknafein que posee un código ético diferente a los demás Drows. Drizzt aprende el uso de las armas de manera destacada, convirtiéndose en un guerrero temible tanto con las armas, como en el uso de la magia, pero también obtiene de su mentor una formación ética incomprensible para la sociedad vil y sin principios que lo rodea. Es precisamente ese código moral aquello que caracteriza a Drizzt y que le produce grandes problemas con los habitantes de la ciudad oscura y que marcara la vida del Drow, sumiéndolo en una contradicción constante entre su formación moral y la vileza, crueldad, traición y maldad propia de su especie.
Regresando al comic, como mencione antes, la adaptación no es mala, incluso entretenida, pero no permite ahondar en lo singularmente aterradora sociedad Drow, que el libro logra reflejar con gran definición y eficacia artística en el detalle. Esto es comprensible, debido a la complejidad que presenta adaptar de manera apropiada una obra literaria y que se queda lejos de plasmar en tres cómics de 48 paginas todo lo que el libro puede ofrecer. Con todo y los inconvenientes mencionados, el trabajo ofrecido es aceptable y que nos permite hacer un esbozo grafico de la atrapante esencia de los reinos de las profundidades, con sus razas, criaturas, ciudades, entornos y rasgos característicos de estos “Reinos Olvidados”.
Por cierto hace unos años en nuestro país, Planeta de Agostini puso a la venta este libro dentro de su colección Literatura Fantástica, así como sus secuelas “El Exilio” y “El Refugio” a un precio muy accesible y con un buen formato editorial.
2 comentarios:
Esta chido el nuevo diseño, una pregunta ¿se van a cambiar a un dominio propio?
Ya lo hisimos, lacovacha.net
Pero, al parecer google tardara unos dias en darnos de alta....
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